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El mercado actual
Nota: El cuadro anterior se actualiza al momento de publicar este documento con las últimas previsiones de consenso. Sin embargo, el texto y los gráficos se preparan con antelación. Por lo tanto, puede haber discrepancias entre las previsiones que figuran en el cuadro anterior y en el texto y los gráficos.
Ayer hablamos del IPC del Reino Unido.
Las solicitudes de hipotecas de la Asociación de Banqueros Hipotecarios (MBA) andan muy bien en lo que va de año. (Tenga en cuenta que las cifras no se entregan de esta forma, pero es una mejor manera de presentarlas).
El ministro de Hacienda del Reino Unido, Rishi Sunak, anunciará la declaración de primavera. La declaración de primavera solía ser el anuncio anual del presupuesto, pero el entonces canciller Philip Hammond lo cambió en 2016 y trasladó el presupuesto al otoño, combinándolo con la declaración de otoño. Sin embargo, la ley sigue diciendo que la Oficina de Responsabilidad Presupuestaria (OBR) tiene que elaborar dos previsiones de endeudamiento y crecimiento cada año. Así que Hammond mantuvo la declaración de primavera, pero la utilizó solo para anunciar las previsiones del OBR y responder a ellas. La declaración no incluía ningún cambio en los impuestos ni en el gasto.
Este año debería ser similar. Es poco probable que el canciller Rishi Sunak haga muchas propuestas de gasto nuevas, si es que hace alguna. Puede que se limite a retocar los presupuestos existentes para hacer algunos cambios en cuatro áreas clave: independencia energética, defensa, nivelación y crisis del coste de la vida (gracias a la inflación). La declaración de primavera no es más que el calentamiento para el evento principal, el presupuesto de otoño, que debería exponer la visión del canciller sobre «una nueva economía post-COVID (…) apta para la nueva era de optimismo».
Sin embargo, el canciller Sunak tendrá algo de margen de maniobra, ya que en el presupuesto de otoño del 27 de octubre el OBR pronosticó que el Gobierno se endeudaría en 183 000 millones de libras en el ejercicio. Pero, gracias a unos ingresos fiscales mejores de lo previsto, ahora se espera que solo se preste unos 160 000 millones de libras. Por lo tanto, tiene 23 000 millones de libras esterlinas a su disposición. Podría seguir a otros países europeos y recortar el impuesto sobre el combustible para amortiguar el golpe de la subida de los precios de la energía. También puede aumentar los umbrales a partir de los cuales los ciudadanos tienen que pagar el impuesto sobre la renta o las aportaciones a la seguridad social.
En general, una política monetaria más estricta y una política fiscal más relajada suelen ser la receta para una moneda más fuerte. Los indicios de que podría relajar la política fiscal podrían considerarse buenos para el crecimiento y, por tanto, positivos para la libra.
Se prevé que las ventas de viviendas nuevas en Estados Unidos aumenten un 1,4 % mensual. Pero las ventas de viviendas existentes de la semana pasada cayeron un 7,2 %, así que no tengo claro por qué deberían subir las ventas de viviendas nuevas. Dicho esto, si nos remontamos a 2004, las dos series de datos solo se mueven en la misma dirección el 51 % de las veces, por lo que saber lo que hizo una te da cero información sobre lo que podría haber hecho la otra. Supongo que con una actividad hipotecaria tan alta (véase más arriba), la gente tiene que estar comprando algunas viviendas, y si no están comprando viviendas existentes (tal vez porque nadie quiere vender) deben estar comprando viviendas nuevas.
Se espera que la confianza de los consumidores de la UE descienda, lo que no es de extrañar si se tiene en cuenta el aumento del número de casos de COVID-19 en febrero y, por supuesto, la guerra en Ucrania. De hecho, me sorprende que no se espere que sea aún más bajo. Supongo que es porque la gente está contenta de que se hayan eliminado la mayoría de las restricciones.
A continuación, durante la noche, comenzamos con los índices preliminares de directores de compras (PMI). Pero de eso hablaré mañana, porque no hay previsiones para los PMI japoneses, y nadie se preocupa mucho por los PMI australianos.
