La Reserva Federal de Estados Unidos persiste en su campaña de dos años contra la inflación, utilizando tasas de interés elevadas para moderar el gasto de los consumidores y equilibrar demanda y oferta, intentando así frenar el crecimiento económico para reducir las presiones inflacionarias.
Contrario a las expectativas, la economía ha mostrado una fortaleza que desafía los intentos de enfriamiento por parte de la Fed. A la espera de la conclusión de la reunión de política monetaria de dos días, los mercados financieros anticipan que el banco central mantendrá los tipos de interés, planteando dudas sobre si la robustez económica es una extensión del gasto excesivo de la pandemia o si indica que las medidas de la Fed no son aún suficientemente restrictivas.
Desde la última reunión en septiembre, donde se decidió no cambiar los tipos, datos recientes han revelado un empleo y un crecimiento económico superiores a lo esperado, con una inflación que, a pesar de moderarse, sigue alta.
Los responsables de la Fed se enfrentan a un dilema. Por un lado, el mercado ha elevado los tipos de interés por su cuenta, con un impacto notable en los rendimientos de los bonos del Tesoro y las tasas hipotecarias, lo que eventualmente debería contener el gasto. Por otro lado, los signos de una desaceleración económica esperada aún no se materializan.
El banco central, que comunicará su decisión a las 18:00 GMT seguido por una conferencia de prensa de Jerome Powell, podría mantener el rango de interés de referencia entre 5,25% y 5,50%. Los inversores dudan de futuros incrementos y están atentos a señales que indiquen posibles cambios.
Los datos recientes sugieren que los ahorros acumulados durante la pandemia aún no se han agotado, permitiendo a los consumidores mantener un gasto elevado que ha impulsado el crecimiento y mantenido la inflación en niveles altos, a pesar de preocupaciones como la reanudación de pagos de préstamos estudiantiles y una baja confianza del consumidor.
La Reserva Federal considera que, aunque su política monetaria está funcionando, el ajuste hacia el objetivo de inflación del 2% es lento. Powell ha expresado que el crecimiento económico debe disminuir y que si no ocurre, será necesario elevar los tipos de interés.
La Fed se encuentra en un equilibrio delicado, resistiendo la presión para subir tasas en un contexto de fortaleza económica que aún no muestra señales claras de ceder ante sus medidas restrictivas. La decisión final y los comentarios de Powell serán cruciales para anticipar el rumbo de la política monetaria a corto plazo.
Conclusión:
La Fed se encuentra en un equilibrio delicado, resistiendo la presión para subir tasas en un contexto de fortaleza económica que aún no muestra señales claras de ceder ante sus medidas restrictivas. La decisión final y los comentarios de Powell serán cruciales para anticipar el rumbo de la política monetaria a corto plazo.
