Los mercados han respondido positivamente a los datos del mercado laboral y del sector servicios en EE. UU., lo que ha impulsado al alza las rentabilidades de los bonos y ha elevado las expectativas de que los tipos de interés se mantengan altos por más tiempo de lo esperado. En EE. UU., los servicios representan más del 75% de la economía, por lo que una demanda saludable se refleja en un mejor crecimiento económico y una sólida confianza del consumidor. Aunque es probable que la economía desacelere durante el segundo semestre del año, la recesión parece improbable a juzgar por los niveles actuales.
Los inversores esperan que la Reserva Federal aumente los tipos en 25 puntos básicos en julio, lo que colocaría los tipos en el rango del 5,25%-5,5%. La perspectiva de una segunda subida en noviembre dependerá de los datos económicos. Sin embargo, lo que parece más claro es que los tipos no bajarán hasta al menos mayo de 2024.
Eventos destacados para esta semana
El miércoles, esperamos la decisión de tipos en Canadá, donde se anticipa un nuevo aumento de 25 puntos básicos, llevando los tipos hasta el 5%. Además, en EE. UU., se publicará el IPC anual del mes de junio, donde se espera una disminución hasta el 3,1%, y el jueves, el IPP mensual, que se espera un ligero aumento del 0,2%. El viernes, se conocerán las nuevas solicitudes de subsidio por desempleo.
El jueves, el BCE publicará las actas de su última reunión y actualizará las previsiones económicas. Además, a finales de semana dará comienzo la temporada de resultados empresariales, con informes de compañías relevantes como UnitedHealth, JP Morgan, Wells Fargo y Citigroup.
Banco Santander
Banco Santander decepcionó a los inversores con la publicación de los resultados del primer trimestre. A pesar de superar las expectativas y registrar ingresos de 2.570 millones de euros, el banco sufrió un fuerte desplome en los beneficios en Brasil y una significativa retirada de depósitos en España. Además, tuvo que hacer frente al pago del impuesto sobre las transacciones financieras introducido a finales del año pasado por el Gobierno español, ascendiendo a 224 millones de euros.
El sector bancario ha sido uno de los grandes beneficiados por el reciente endurecimiento monetario. No obstante, ahora se enfrenta a un entorno complejo, ya que las subidas han sido tan rápidas que amenazan con una fuerte desaceleración económica.
En Brasil, región que aporta al Santander el 18% de sus beneficios, la actividad bancaria ha sufrido una fuerte contracción debido a los altos tipos de interés impuestos para frenar la inflación. El mercado ha especulado con la posibilidad de una bajada en los tipos de interés que se mantiene desde hace un año.
La semana pasada, comenzó a tomar fuerza la posibilidad de que el Banco Central de Brasil reduzca los tipos de interés en su próxima reunión de septiembre. Aunque aún no hay declaraciones públicas que confirmen esta decisión, el mercado estaría empezando a descontarlo. Esta decisión podría ayudar a reactivar el crecimiento económico y, por lo tanto, la demanda de crédito.
En el corto plazo, el Banco Santander tiene su primera resistencia en los 3,55 euros por acción, mientras que el siguiente nivel destacado se encuentra en los máximos anuales alrededor de los 3,90 euros. En caso de retroceso, el primer soporte está en la zona entre los 3,30 y los 3,20 euros, y el segundo, de mayor relevancia, en los 3 euros. Los próximos resultados empresariales podrían ayudar a retomar la tendencia después de las recientes caídas.
Esta semana serán pocos pero importantes los datos económicos. Adjuntamos los más relevantes: